Mi alma grita y tú la callas o prefieres no oírla,
Pero cómo callar lo que se respira en el aire,
Guardar el sentimiento que provocas,
Jugar a seres y placeres clandestinos, todo por dar un tiempo,
Un tiempo que tiembla de miedo, que agoniza sin caricias y vive de recuerdos.
No pretendo ser recuerdos,
domingo, 9 de mayo de 2010
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2 comentarios:
En ocasiones los recuerdos son mas confortables que el presente
Cuentame, cuáles son tus estrategias para poder dominar esa voz delirante, enardecida e improvisada... uno, intenta con gallardía callar lo que se piensa, creo que eso se puede lograr...
pero lo que se siente, ¡jamás! podrás silenciarla por un instante breve, pero siempre termina a flote más fuerte que nunca...
Sabes que me encantan tus delirios y tristezas :) Saludos!
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